top of page
  • Foto del escritorAlexis Sazo

Siguiendo sus pisadas



No hay acepción de personas para con Dios. (Romanos 2:11)


La Biblia no solo nos dice que no hagamos acepción de personas, sino más bien nos dice que amemos a todas las personas, porque el amor es un mandamiento de Dios, quien no hace acepción de personas (Deuteronomio 10:17). Entonces, ¿verdaderamente debo amar a todo el mundo? Sí, a todos, ese es el mandamiento divino:

Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que éstos. (Marcos 12:30–31)

¿Y debo amar a mi cónyuge que es tan difícil? Sí, pues dice: «Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella» (Efesios 5:25). «Que (las ancianas) enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos» (Tito 2:4).

¿A mis enemigos también? Sí. «Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen» (Mateo 5:44).


¿A los extranjeros? También. «Amaréis, pues, al extranjero» (Deuteronomio 10:19).

Entonces, ¿verdaderamente debo amar a todos? Así es, porque si somos hijos de Dios, debemos tener los rasgos de nuestro Padre. Él amó al mundo, a pesar de que este se rebeló contra Él. Bien dice en Juan 3:16 que nos amó de tal manera que dio a su Hijo unigénito. Por eso es que Dios nos pide que amemos como Él nos ama. Hasta dar nuestra vida por nuestros hermanos (1 Juan 3:16). Este es el amor ilimitado de Dios que los creyentes son llamados a manifestar, porque son receptores del mismo y lo disfrutan cada día. Aunque claro, la fuente de este amor no está en nosotros, sino en Dios, quien nos lo da a través del Espíritu Santo, ya que la primera manifestación del fruto del Espíritu es el amor (Gálatas 5:22).

No olvidemos jamás que «para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas» (1 Pedro 2:21).


68 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo
bottom of page