Bienaventurados los que padecen persecución

Versión en video: https://youtu.be/xXIFT_3ksjM

Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.  (Mateo 5:10)

Seguir a Cristo en un mundo que va en la dirección opuesta implica enfrentar oposición. El Señor Jesús no prometió una vida fácil a quienes le siguen, sino una vida llena de propósito y bendición, incluso en medio del sufrimiento. La persecución por causa de la justicia no es un castigo ni una señal de que Dios nos ha abandonado, sino una confirmación de que caminamos en su luz.

A lo largo de la historia, los verdaderos discípulos de Cristo han enfrentado rechazo, burlas e incluso violencia por mantenerse firmes en la verdad. Pero Dios nos asegura que no estamos solos. Cuando sufrimos por su causa, Él nos sostiene y nos promete una recompensa incomparable: el reino de los cielos.

Sin embargo, hoy en día muchos cristianos padecen por el nombre de Cristo en lugares como África, medio oriente o partes de Asia. Y conforme a la promesa del Señor, son bienaventurados. Pero no olvidemos que nosotros, los que no padecemos persecución, debemos orar por nuestros hermanos que sí padecen (Hebreos 13:3).

Mis hermanos, si hemos experimentado algún tipo de rechazo por ser fieles a Cristo, recordemos que el Señor Jesús mismo fue rechazado y perseguido. Por tanto, no debemos desanimarnos ni responder con amargura, sino con gozo y confianza, sabiendo que nuestro galardón está en el cielo. Oremos para que Dios nos fortalezca en las pruebas y nos ayude a mantenernos firme en la fe.